Sincronizar cerebros para conducir naves
espaciales podría tener un futuro en la exploración sideral, además de ser una
gran experiencia de comunión virtual.
Dos mentes son mejores que una, al menos para
mover naves espaciales. Investigadores de la Universidad de Essex observaron la
precisión de mando de individuos o grupos de dos personas conduciendo una nave
espacial virtual con sus pensamientos y descubrieron que las señales emitidas
por dos personas son mejor entendidas por una interfaz entre cerebro y
computadora (BCIs por sus siglas en inglés).
Se desarrolló un simulador de vuelo en el que
usuarios conectados a una interfaz BCI tenían que manejar una nave hacia el
centro de un planeta pensando en una de ocho direcciones. Las señales cerebrales
representando cada dirección eran interpretadas por la máquina y transformadas
en tiempo real para dirigir la nave.
Los resultados muestra que las simulaciones de
usuarios únicos tuvieron un 67% de precisión mientras que los usuarios que
fusionaron sus mentes alcanzaron el 90%. El tiempo de reacción ante contigencias
climatológicas en la atmósfera del planeta también fue superior para aquellos
operando en conjunto. Los investigadores explican que combinar señales cancela
el ruido aleatorio que generan las señales electroencefalográficas. Asimsimo,
el utilizar dos mentes tiene como ventaja que si una se distrae la otra puede
mantener la coherencia de la señal (copiloteo psíquico).
NASA investiga la posibilidad de controlar
exploradores planetarios vía remota, posiblemente con un respaldo bi-mental.
Aunque esto apenas está en etapas especulativas.
Buckminister Fuller, el gran ingeniero (creador
de los domos geodésicos), filósofo y futurista decía que “la Tierra es una nave
espacial”, ¿si todos sincronizaramos nuestra intención empalmando ondas
cerebrales, hasta dónde podríamos llevar la nave planetaria? Por otro lado casi
cualquier cosa puede ser una nave espacial, y entonces beneficiarse de la
co-intención mental sincrónica: coherencia que navega con mayor firmeza a través
del espacio.
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